Este domingo, el Papa Francisco brindó su bendición a los fieles presentes en la Plaza San Pedro por primera vez tras casi diez semanas de medidas restrictivas en El Vaticano a causa de la pandemia del coronvirus. La última celebración con público había sido el 1º de marzo pasado.
Con pedido de uso de barbijos y la obligatoriedad de higiniezarse las manos para entrar, más de un centenar de fieles siguió desde la plaza vaticana, a través de pantallas, la oración dominical que el Papa dirigió desde la Biblioteca del Palacio Apostólico.
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El Sumo Pontífice pidió la "victoria de la humanidad" sobre "toda enfermedad del cuerpo, del corazón y del alma". Francisco también recordó a quienes "en cada parte del mundo trabajan con pasión y empeño por la paz, por el diálogo entre naciones, por el servicio a los pobres, por el cuidado de la creación y por la victoria de la humanidad sobre toda enfermedad del cuerpo, del corazón y del alma".
Con la flexibilización gradual de la cuarentena que impuso el gobierno italiano, el Vaticano reabrió esta semana esta semana la Basílica a los fieles y turistas. Además, el próximo 1º de junio la Santa Sede reabrirá sus museos, también con medidas de distanciamiento social, uso obligatorio de barbijos y la necesidad de reserva para el ingreso.
