Philipp Budeikin logró una leve condena de parte de la justicia rusa, ya que sólo fue juzgado por el caso de dos chicas que fracasaron en su intento de quitarse la vida, a través del tristemente famoso juego denominado "La ballena azul".
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El joven ruso de 22 años recibió el beneficio de prisión abierta y sólo tendrá que pasar tres años y cuatro meses entre rejas, a pesar de haber confesado la incitación al suicido de 17 adolescentes en su país. En su estadía en la cárcel, tendrá algunos privilegios, como convivir frecuentemente con su familia.
La sentencia generó gran indignación en Rusia y también en otros paises donde "La ballena azul" se cobró la vida de numerosos menores de edad.
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Según los medios europeos, la condena fue leve porque solo se pudo demostrar su vinculación con las adolescentes que se salvaron. Al ser arrestado, Budeikin se refirió a las víctimas como “basura biológica”, que estaban “felices de morir” y que él con su juego lograba “limpiar la sociedad”.
El diario inglés Mirror remarca que el joven ha recibido infinidad de cartas de amor en su celda enviadas por adolescentes obsesionadas con el autor del juego que les lavaba el cerebro.
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‘La ballena azul’ proponía completar 50 desafíos, incluyendo hacerse un agujero en la mano, tatuarse una ballena en el brazo o pasar 24 horas sin dormir viendo películas de terror. El premio final era la muerte. El nombre fue elegido porque las ballenas se acercan a las playas para morir sobre la arena.
