La situación de Dilma Rousseff se agrava. La comisión de juicio político aprobó hoy, con 38 votos a favor y 27 en contra, el proceso contra la presidenta de Brasil. Está acusada de haber manipulado las cuentas públicas de los dos últimos años para esconder el déficit y garantizarse así la reelección a fines de 2014.
Ahora, para que el juicio político se lleve a cabo, deberá ser aprobado por la Cámara de Diputados con una mayoría especial (dos tercios del total) y luego por el Senado, que definirá por mayoría simple.
Si lo aprueban, Rousseff será apartada temporalmente de su cargo y el vicepresidente Michel Temer –quien hasta hace dos semanas era aliado de Dilma- asumirá la presidencia hasta el juicio final.
Discurso filtrado “accidentalmente”. Se divulgó este lunes un audio de Temer con las palabras que dirigiría al pueblo brasileño en caso de que Roussef sea destituida. En él, el vicepresidente llama a unirse "para sacar a Brasil de la crisis". El Partido de los Trabajadores de la presidenta tildó el prematuro discurso como "un golpismo descarado".
