La muerte del papa Francisco causó una verdadera movilización en diferentes puntos del mundo. En este contexto miles de personas han decidido acercarse a la basílica de San Pedro para presentar su respetos al pontífice.
Este jueves cuatro jugadores de la Selección Argentina se sumaron a la multitud que participó del último adiós a Jorge Bergoglio.
El cordobés Paulo Dybala fue quien encabezó la delegación de la Roma que asistió al velorio. Junto a él estuvieron presentes los argentinos Leandro Paredes y Matías Soulé.
Los tres permanecieron durante unos 15 minutos frente al féretro de madera abierto.
Los tres fueron captados por las cámaras de los medios vestidos con trajes negros y contemplando con mirada de pesar el cuerpo del Papa.
La comitiva del club romano incluyó también al entrenador Claudio Ranieri, al director deportivo francés Florient Ghisolfi, y a los capitanes Lorenzo Pellegrini, Gianluca Mancini y Bryan Cristante, además de otros miembros de la dirigencia de la Roma.

Más tarde se hizo presente en el lugar Valentín Castellanos, quien llegó con una comitiva del club Lazio. El presidente Claudio Lotito, el técnico Marco Baroni, el director deportivo Angelo Fabiani, el capitán Mattia Zaccagni y otros dirigentes del club celeste, también estuvieron allí.