Cuando parecía que los estudiantes de 6° año del Instituto Sagrado Corazón de Oliva iban a salir rumbo a Bariloche, el viaje se vio afectado por un escándalo.
Padres de la institución aseguraron que los conductores se encontraban visiblemente en mal estado por lo cual solicitaron la Municipalidad de la ciudad que agentes de tránsito hicieran un test de alcoholemia. Los dos conductores dieron positivo. Fuentes policiales, indicaron que el primero dio 0,1 de alcohol en sangre y el segundo 0,6.
“Fue la jefa de Tránsito y se les hizo un segundo test que volvió a dar positivo”, precisó el secretario de Gobierno de Oliva, César Salvatori, a ElDoce.tv. Luego de eso solicitaron la presencia de la jueza de Faltas, quien retuvo las licencias a ambos conductores. Los hombres fueron demorados debido a la contravención.
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En ese momento se solicitó la presencia de nuevos choferes. Cuando se les realizó la prueba a los reemplazantes el dispositivo también marcó por arriba de 0 en la prueba.
“Cuando constatamos los dos positivos se hizo un nuevo test al director del colegio, que es papá de la promoción y una persona que no consume alcohol habitualmente y el resultado fue 0”, contó Orieta Pérez, mamá de uno de los estudiantes a ElDoce.tv. “Evidentemente los equipos funcionan”, aclaró.
Minutos más tarde, llegó al lugar la Policía Caminera. Los efectivos realizaron una nueva prueba al reemplazo de los primeros trabajadores con un dispositivo diferente. En esta ocasión el resultado fue negativo. De esta manera los estudiantes finalmente lograron partir, utilizando un colectivo diferente ya que las autoridades consideraron que el primero no estaba en óptimas condiciones.

Sebastián Cañellas, gerente del área de comunicación de Flecha Bus, aseguró que ninguno de los trabajadores estaba alcoholizados y que todo se debió a un problema del dispositivo de la Municipalidad que estaba mal calibrado.
En este sentido, César Salvatori, afirmó que fue una situación confusa y que “no tienen certezas exactas” de si el aparato funcionaba correctamente.
Por su parte desde la Policía de Córdoba, destacaron que los dos primeros choferes no están detenidos, aunque si fueron demorados y aseguraron que los alcoholímetros están homologados.
La investigación ahora se centra en los dos primeros conductores para determinar si estaban o no bajo estado de ebriedad.
+ VIDEO: Desde la empresa aseguran que los choferes no estaban alcoholizados

Nicolás Zanotti, representante de la empresa Urquiza, explicó en diálogo con Telenoche que la compañía estaba convencida de que los choferes asignados estaban en condiciones de trabajar. “Teníamos la plena seguridad de que las personas que estaban ahí no estaban alcoholizadas”, afirmó al relatar el inicio del conflicto por los controles de alcoholemia.
Según detalló, los resultados fueron contradictorios: “Llegaron, les dio positivo el test de alcoholemia; mandamos dos choferes nuevos y también les dio positivo la alcoholemia, y mandamos otra persona más que también le dio positivo de alcoholemia. A raíz de eso llega la Policía Caminera, controla a las cinco personas que mandamos nosotros y les dio negativo la alcoholemia. O sea, lo que está mal es la herramienta con la que controló la Policía Municipal”. Esto reavivó la discusión sobre la fiabilidad del dispositivo usado por el municipio.
Tras confirmar que el colectivo terminó viajando, Zanotti fue consultado por el periodista Néstor Ghino respecto a qué choferes quedaron finalmente al mando: los primeros testeados o los de reemplazo. El vocero respondió: “Después le voy a corroborar eso, pero en teoría salieron con los segundos”. Ante esa explicación, surgió una nueva pregunta: por qué, si habían dado negativo con la Policía Caminera, no salieron los primeros conductores.


