La investigación por el crimen del remisero Martín Sebastián Palacio sumó un nuevo capítulo estremecedor. La Policía de Entre Ríos amplió la búsqueda de los restos faltantes del cuerpo, que fue hallado descuartizado hace dos semanas en un descampado de Colonia Yeruá, a unos 30 kilómetros de Concordia.
Los operativos se extendieron a tres provincias: Entre Ríos, Santa Fe y Córdoba, ante la hipótesis de que Pablo Laurta, el uruguayo detenido por el doble femicidio de Luna Giardina y Mariel Zamudio, habría descartado la cabeza y los brazos en diferentes lugares durante su fuga.

El cuerpo del remisero fue encontrado desnudo y mutilado dentro de una bolsa, luego de que un efectivo policial advirtiera un fuerte olor a descomposición durante un rastrillaje.
“Diagramamos la búsqueda tomando en cuenta las cámaras de seguridad y la trayectoria de las antenas de telefonía, tanto del imputado como de la víctima”, explicó a Infobae el comisario inspector José María Rosatelli, jefe de la Departamental Concordia.
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De acuerdo a los registros, Laurta atravesó tres provincias antes de incendiar el auto de la víctima, un Toyota Corolla blanco, hallado totalmente calcinado el 9 de octubre en Villa Esquiú, en Córdoba, dos días después de la desaparición de Palacio.
Tres hipótesis bajo análisis
Los investigadores trabajan sobre tres líneas principales:
- Que Laurta haya desmembrado el cuerpo en la zona rural de Chañar y arrojado los restos en distintos puntos de su trayecto hacia Córdoba.
- Que los restos hayan sido devorados por animales o dispersados por las lluvias.
- Que el asesino transportara parte del cuerpo en el vehículo, oculto bajo mantas, y dejara restos en Córdoba tras incendiar el auto.
La Policía Científica realiza análisis en el habitáculo del vehículo para detectar restos óseos o genéticos, mientras que drones y perros rastreadores trabajan en zonas rurales de San Salvador, Federal y Colonia Yeruá.
El caso, que involucra a un asesino acusado de tres homicidios, se convirtió en uno de los más estremecedores del último tiempo. Laurta, detenido en el penal de Cruz del Eje, enfrenta dos causas paralelas: el doble femicidio de Córdoba y el crimen del remisero entrerriano, cuyo final sigue sin aparecer.



