Horacio Grasso quedó en el centro de la escena tras el hallazgo de un cadáver en avanzado estado de descomposición en el departamento de calle Buenos Aires al 300 donde cumplía la prisión domiciliaria. El expolicía está condenado por el crimen del niño Facundo Novillo en Colonia Lola y su exabogado, Enrique Pérez Aragón, brindó detalles sobre su estado de salud, su conducta en la cárcel y cómo era su vida durante la prisión domiciliaria.
En diálogo con Arriba Córdoba, Pérez Aragón describió a su ex defendido como una persona muy medicada y con un cuadro clínico delicado: “Tomaba una batería de medicamentos, algunos psiquiátricos. Pasaba más tiempo dormido que despierto”.
+ VIDEO: la palabra del exabogado de Grasso:

Además, explicó que Grasso fue sometido a múltiples pericias médicas, que derivaron en la decisión judicial de otorgarle el beneficio de prisión domiciliaria. Entre los diagnósticos que presentó figuran cardiopatía lateral aguda, síndrome vertiginoso agudo y dilatación de la aurícula.
Domiciliaria
Según la palabra del abogado, el expolicía estuvo 22 años detenido y en 2019 sufrió un deterioro físico severo. A raíz de ello, la defensa solicitó la domiciliaria, pero fue revocada por un juez. Ante el agravamiento de la salud, se presentó un nuevo pedido y fue aceptado, fijando como domicilio el departamento heredado, donde días atrás fue hallado el cuerpo sin vida de una mujer de 30 años.

Consultado por las reiteradas salidas del edificio, Pérez Aragón subrayó que todas fueron justificadas: “Tenía una tobillera electrónica que registraba movimientos. Cuando salía, se notificaba al juez. Siempre con certificado médico”.
+ MIRÁ MÁS: Los macabros datos de la autopsia al cadáver encontrado en un placard en el centro de Córdoba
Las salidas eran, en su mayoría, por tratamientos odontológicos o al Hospital Córdoba. También tenía autorización para ir a visitar a su madre y recibir a personas en su departamento, lo que aumenta las sospechas sobre un posible crimen por el hallazgo del cadáver.
Por ahora, la Justicia investiga las causas del fallecimiento, la identidad de la persona y si Grasso tuvo alguna participación. “Desde diciembre dejé de representarlo y no tengo datos ni poder para opinar”, concluyó el exabogado del condenado.