Investigadores del CONICET confirmaron el hallazgo de una nueva especie de dinosaurio herbívoro que habitó la región de Añelo, en Neuquén, hace aproximadamente 95 millones de años, durante el Cretácico. Así se escribe una nueva página de estos animales con Argentina.
Se trata del Astigmasaura genuflexa, un ejemplar de la familia de los rebaquisáuridos, que medía 18 metros de largo y pesaba cerca de 10 toneladas.

Para este hallazgo hicieron cinco campañas paleontológicas en las que se realizaron más de 30 días de excavaciones. Así, para liberar los restos fósiles de la roca utilziaron herramientas de todo tipo, desde martillos neumáticos hasta cortadoras de roca, debido a la complejidad del terreno.

Cómo era
Se trataba de un cuadrúpedo, de cuello y cola largos, con una estructura corporal muy particular: presentaba arcos hemales debajo de la cola, huesos que protegían el sistema nervioso y circulatorio.
Sus patas eran esbeltas y terminaban en dedos ensanchados, y se destacaba por tener arcos en forma de bota y estrella, una morfología inédita hasta ahora la familia de este tipo de dinosaurios.
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Vale señalar que el nombre del género, Astigmasaura, se vincula con el lugar del hallazgo, mientras que el epíteto genuflexa alude a la peculiar forma de sus extremidades posteriores.
En este sentido los investigadores también evocaron el apodo “El Orejano”, expresión popular para identificar a un animal sin dueño ni marca, como guiño cultural al carácter inédito de esta especie.

Flavio Bellardini, becario posdoctoral del CONICET, consideró muy importante este descubrimiento: “Astigmasaura es una de las últimas especies de dinosaurios rebaquisáuridos antes de su extinción, ocasionada hace unos 90 millones de años atrás, por lo que es fundamental para reconstruir las fases finales de la historia evolutiva del grupo, por lo menos en Patagonia”.
Este descubrimiento no solo amplía el conocimiento sobre los gigantes del pasado que habitaron nuestro suelo, sino que también confirma una vez más a Neuquén como una de las regiones más ricas en patrimonio paleontológico de Sudamérica.