De buscar el amor a vivir la peor de las pesadillas. Una mujer conoció a un hombre por las redes sociales y en la primera cita su pretendiente le secuestró a su hijo de 6 años.
El hecho tuvo lugar el domingo 23 de febrero pasado en la plaza del barrio La Matera en la ciudad de Quilmes, Buenos Aires. Tras intercambiar mensajes por Facebook, la pareja acordó encontrarse y ella fue acompañada por sus dos hijos de 6 y 14 años.
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En plena reunión el grupo decidió regresar a la casa de la mujer porque el hijo mayor quería ir al baño. La madre entró a la vivienda con el adolescente mientras el niño y el hombre se quedaron afuera. Al salir descubrió que ninguno de los dos estaba en el lugar.
La mujer llamó a su cita pero este nunca le contestó. En medio de la desesperación una testigo le dijo que el hombre se lo había llevado. “Le preguntó a una vecina y le dijo que había visto como el nene se iba con un hombre”, reveló a Clarín una fuente cercana.
Antes esto la madre hizo la denuncia y tomó intervención la fiscal Ximena Santoro, de la Fiscalía N° 7 de Quilmes. La difusión de una foto del menor permitió que una vecina lo reconozca y llame al 911. “Lo encontraron dos chicas que, al verlo solo y llorando, se le acercaron para ver qué le pasaba. Él les dijo que el novio de la madre se lo había llevado y lo había dejado ahí diciéndole que no se fuera, que enseguida volvía con un auto”.
El menor fue trasladado al hospital municipal y la Secretaría de Niñez y Desarrollo Social activó el protocolo “Trabajo de Alta”. Se trata de una medida por la cual el menor permanece internado hasta que se identifica a los referentes afectivos que pueden hacerse cargo de él.
Tras un amplio operativo la Policía logró detener al secuestrador el 10 de marzo. El hombre fue interceptado en la vía pública cuando salió de su escondite en un asentamiento del sur del conurbano llamado Los Eucaliptos.
En la declaración el acusado dijo que estaba por viajar a la ciudad de Mar del Plata pero no explicó con qué intención planeaba llevarse al nene. El hombre quedó detenido por “sustracción de menores”, un delito que implica una pena de 5 a 10 años de cárcel.